HEMATURIA VESICAL ENZOOTICA BOVINA
Sinonimos: meada
roja, meada de sangre, mal de la orina, intoxicación por samambaia, hematuria
crónica bovina, hematuria vesical, vejigazo.
Definicion
Enfermedad crónica no infecciosa de los bovinos,
caracterizada por la presentación de lesiones hemangiomatosas de la pared de la
vejiga urinaria, y clínicamente por hematuria intermitente de una duración de
semanas o meses y muerte por emaciación y Anemia. Se ha presentado también en
ovinos y búfalos.
Esta enfermedad es descripta en varias Provincias Argentinas (Jujuy, Salta,
Misiones, Corrientes, etc.) y además en varios países de América del Sur y
Central (Venezuela, Ecuador, Costa Rica, Bolivia, Colombia, Brasil, etc.),
Ameríca del Norte:
parte de los Estados Unidos; Europa (Gran Bretaña, y parte del este de Europa;
y varios países Asiáticos: Japón, China, India, Turquía, Filipinas), África,
Australia y Nueva Zelanda.
Etiologia
Esta enfermedad tiene
una relación muy estrecha con el consumo prolongado de un helecho conocido como:
ala de cuervo o samambaia, helecho
macho, (Pteridium aquilinum).
De amplia distribución
mundial. Se la considera maleza e invade zonas de pastoreo, áreas boscosas y
taladas o quemadas, y crece abundantemente en espacios soleados abiertos. Es
considerada la 5ta. Maleza de importancia en el mundo. El efecto tóxico del pteridium
en animales ha sido reconocido por numerosos trabajos Científicos.
Caracteristicas:
• Crece en suelos
pobres en nutrientes y preferiblemente ácidos
• Entre 600 y 2000
msnm
• Contiene rizomas
que se activan después de las nevadas o quemas de los campos.
• La combinación de
alta viabilidad y crecimiento del helecho, los hábitos de alimentación del
bovino y la alta concentración de metabolitos en las plantas, incrementan el
riesgo de envenenamiento de los animales sobre todo en la época seca.
El principal principio toxico es un glucósido
denominado PTAQUILOSIDO (PT) y su intermediario activado DIENONA; PT es considerado un Carcinógeno de acción directa y
la DIENONA el último Carcinógeno, que es la forma activada de PT.
Cualquier herbívoro
que consuma Pteridium aquilinum estaría expuesto al menos a 5 sustancias bioactivas las cuales poseen
actividad tóxica, mutagénica, carcinogénica, y quizás teratogénico y
embriogénica.
Sintomatologia
Se caracteriza por la emisión intermitente de
sangre en la orina (Hematuria) acompañada de períodos de regresión de pocas
semanas o meses, con poliuria y disuria, que responde a la presencia de
lesiones múltiples de la vejiga urinaria. Acompañada de anemia y pérdida
progresiva de la condición corporal del animal, y disminución marcada de la
producción de leche. Este cuadro puede prolongarse por algún tiempo desde meses
hasta más de 2 años. Los animales que sobreviven más tiempo pueden observarse
en grave estado de caquexia y muerte.
Los hallazgos clínicos y clínico patológicos surgen
como expresión de los tumores de origen epitelial y vascular presentes en la
vejiga urinaria, entre los que destacan: palidez de las mucosas, taquipnea,
taquicardia, leucocitosis, altos niveles de nitrógeno ureico, hipoproteinemia y
hipoalbuminemia, baja densidad urinaria, proteinuria, presencia de sangre
entera y nitritos en orina. Datos indicativos de anemia, procesos infecciosos y
disfunción renal. Los casos graves se manifiestan por expulsión de grandes
cantidades de sangre, a menudo en forma de coágulos, por la orina. El animal
desarrolla una anemia hemorrágica y puede morir tras una o dos semanas. En
casos menos graves, la hematuria clínica es leve y discontinua, incluso subclínica
persistente o intermitente. El estado general empeora gradualmente a lo largo
de varios meses.
El
ptaquilosido (PT) es el causante de las lesiones
tumorales de carácter maligno que se descubren en los animales.
La problemática se asocia a animales adultos
mayores a dos años de edad y consumo continuo de pequeñas cantidades de la
planta durante un tiempo muy largo, razón por la cual el padecimiento se
considera de carácter crónico. Al respecto, se ha señalado que es necesario el
consumo de 200 a
500 g
diarios de la planta toxica durante seis meses a dos años, para que se produzca
este cuadro. Sin embargo, otros investigadores consideraron que incluso
cantidades de la planta menores a 10 grs./Kg. de peso vivo, ingeridas durante
menos de 1 ano, ocasionan la aparición de este cuadro clínico.
La
morbilidad esta entre 10 a
20% y su letalidad es del 100%.
Tratamiento
No hay tratamiento específico, solo tratamiento
sintomático (antibióticos, anticoagulantes, antiinflamatorios, etc.) por un
tiempo. Una vez desencadenada la enfermedad es de carácter letal.
Métodos de
control
Mecánico: tradicionalmente los agricultores recurren a la
pala y al machete, medios que resultan poco eficaces, debido a que dejan
intacto el rizoma, rebrotando luego los helechos con igual o mayor vigor.
El control manual de los helechos no da buenos
resultados, debido a su forma de propagación; cuando tratamos de arrancarlos
quedan rizomas (raíces subterráneas horizontales) en el suelo que pronto dan
origen a una nueva planta.
Cultural: las
poblaciones de helechos se ven sensiblemente disminuidas por la presencia de
sombra, de ahí que en sistemas silvopastoriles esta maleza suele desaparecer o
persistir, pero en pequeñas cantidades.
Debido a que siempre se ha asociado su presencia
con suelos ácidos, es común que los agricultores apliquen cal, buscando
modificar el pH para ejercer un control indirecto sobre el helecho. No
obstante, no hay evidencias científicas de que por esta vía se puedan reducir
las poblaciones de esta maleza.
Químico: diferentes
investigadores han probado herbicidas para el control de esta maleza. Según el
reporte de algunos autores "los mejores resultados en el control de los
helechos se obtuvieron con 2,4,5-T más sal común, en dosis de 5 litros más 160
Kg./ha y con Glifosato a 5 litros por hectárea".
Con el uso de herbicidas sistémicos como Picloran (2 litros ) mezclado con
Metsulfuron en dosis de 10 a
15g, todo esto en 200 litros de agua, los resultados obtenidos en las pruebas
realizadas han sido excelentes.
Biológico: desde
el punto de vista del control biológico han sido reportados diferentes hongos
de los géneros Ascochíta, Septoria y Phoma, que atacan al helecho en su estado
natural. Sin embargo, todavía no existe una tecnología que pueda ser utilizada
en materia de control biológico.
Implicancia
en salud pública
La posibilidad de que la leche de bovinos sea vía
de exposición del humano a los carcinógenos del Pteridium Aquilinum cobró importancia con la demostración de las
propiedades carcinogénicas de la leche de vacas alimentadas con esa planta
(Pamucku et al., 1978; Villolobos-Salazar et al., 1990).
En estudios
epidemiológicos realizados en Costa Rica, país con una de las tasas de
incidencia de cáncer gástrico más alta en el mundo, se encontró que la
población de las regiones altas, con potreros invadidos por el Pteridium
aquilinum, sufre una tasa de incidencia de cáncer de estómago 2,73 veces mayor
que la de la población que habita en las zonas bajas libre de Pteridium
aquilinum (Villalobos-Salazar et al., 1989).
Otro de los elementos que ha dado impulso a los
estudios sobre los efectos tóxicos del Pa lo constituye el aislamiento del
ptaquilósido de leche de vacas alimentadas con esta planta (Alonso-Amelot et
al., 1996; Villalobos-Salazar et al., 2000).
Todo esto condujo a que se realizaran
investigaciones sobre los factores que pueden incidir en el nivel de
contaminación de la leche en las regiones con pasturas invadidas por el Pteridium
aquilinum.
Estudios recientes llevados a cabo en Costa Rica
demuestran que la concentración de ptaquilósidos es mayor en el Pteridium
aquilinum tierno, seguido por el intermedio y el adulto.
Se estudió también la influencia de la subespecie
sobre los niveles de ptaquilósidos encontrándose una mayor concentración de
esta sustancia en todos los estadios de crecimiento en la subespecie Arachnoideum
que en los de la subespecie Caudatum (Villalobos et al., 2000).
También fue objeto de estudio la curva de
eliminación del ptaquilósido por leche y los efectos de la cocción y de la
pasteurización sobre los niveles del carcinógeno. Se encontró que el
ptaquilósido aparece en la leche 54 horas después de la ingesta del Pteridium
aquilinum, alcanza el pico de mayor concentración a las 78 horas y disminuye en
un 50% a las 115 horas. La pasteurización y la cocción disminuyeron los niveles
de ptaquilósidos en la leche en un 47% y un 74% respectivamente
(Villalobos-Salazar et al., 2000).
POR LO ANTES MENCIONADO SE RECOMIENDA EVITAR EL
CONSUMO DE LECHE DE ANIMALES ENFERMOS Y SOBRE TODO DE LECHE CRUDA.
La bibliografía de referencia y los estudios leídos
para realizar el presente resumen datan desde 1976.
LES RECOMENDAMOS CHARLAR SIEMPRE CON EL PROFESIONAL
VETERINARIO DE SU CONFIANZA PARA ACLARAR DUDAS.