martes, 13 de noviembre de 2012




HEMATURIA VESICAL ENZOOTICA BOVINA


Sinonimos: meada roja, meada de sangre, mal de la orina, intoxicación por samambaia, hematuria crónica bovina, hematuria vesical, vejigazo.


Definicion

Enfermedad crónica no infecciosa de los bovinos, caracterizada por la presentación de lesiones hemangiomatosas de la pared de la vejiga urinaria, y clínicamente por hematuria intermitente de una duración de semanas o meses y muerte por emaciación y Anemia. Se ha presentado también en ovinos y búfalos.

Esta enfermedad es descripta en varias Provincias Argentinas (Jujuy, Salta, Misiones, Corrientes, etc.) y además en varios países de América del Sur y Central (Venezuela, Ecuador, Costa Rica, Bolivia, Colombia, Brasil, etc.), Ameríca del Norte: parte de los Estados Unidos; Europa (Gran Bretaña, y parte del este de Europa; y varios países Asiáticos: Japón, China, India, Turquía, Filipinas), África, Australia y Nueva Zelanda.


Etiologia

Esta enfermedad tiene una relación muy estrecha con el consumo prolongado de un helecho conocido como: ala de cuervo o samambaia, helecho macho, (Pteridium aquilinum).
De amplia distribución mundial. Se la considera maleza e invade zonas de pastoreo, áreas boscosas y taladas o quemadas, y crece abundantemente en espacios soleados abiertos. Es considerada la 5ta. Maleza de importancia en el mundo. El efecto tóxico del pteridium en animales ha sido reconocido por numerosos trabajos Científicos.


Caracteristicas:

• Crece en suelos pobres en nutrientes y preferiblemente ácidos
• Entre 600 y 2000 msnm
• Contiene rizomas que se activan después de las nevadas o quemas de los campos.
• La combinación de alta viabilidad y crecimiento del helecho, los hábitos de alimentación del bovino y la alta concentración de metabolitos en las plantas, incrementan el riesgo de envenenamiento de los animales sobre todo en la época seca.

El principal principio toxico es un glucósido denominado PTAQUILOSIDO (PT) y su intermediario activado DIENONA; PT es considerado un Carcinógeno de acción directa y la DIENONA el último Carcinógeno, que es la forma activada de PT.
Cualquier herbívoro que consuma Pteridium aquilinum estaría expuesto al menos  a 5 sustancias bioactivas las cuales poseen actividad tóxica, mutagénica, carcinogénica, y quizás teratogénico y embriogénica.


Sintomatologia

Se caracteriza por la emisión intermitente de sangre en la orina (Hematuria) acompañada de períodos de regresión de pocas semanas o meses, con poliuria y disuria, que responde a la presencia de lesiones múltiples de la vejiga urinaria. Acompañada de anemia y pérdida progresiva de la condición corporal del animal, y disminución marcada de la producción de leche. Este cuadro puede prolongarse por algún tiempo desde meses hasta más de 2 años. Los animales que sobreviven más tiempo pueden observarse en grave estado de caquexia y muerte.
Los hallazgos clínicos y clínico patológicos surgen como expresión de los tumores de origen epitelial y vascular presentes en la vejiga urinaria, entre los que destacan: palidez de las mucosas, taquipnea, taquicardia, leucocitosis, altos niveles de nitrógeno ureico, hipoproteinemia y hipoalbuminemia, baja densidad urinaria, proteinuria, presencia de sangre entera y nitritos en orina. Datos indicativos de anemia, procesos infecciosos y disfunción renal. Los casos graves se manifiestan por expulsión de grandes cantidades de sangre, a menudo en forma de coágulos, por la orina. El animal desarrolla una anemia hemorrágica y puede morir tras una o dos semanas. En casos menos graves, la hematuria clínica es leve y discontinua, incluso subclínica persistente o intermitente. El estado general empeora gradualmente a lo largo de varios meses.

El ptaquilosido (PT) es el causante de las lesiones tumorales de carácter maligno que se descubren en los animales.

La problemática se asocia a animales adultos mayores a dos años de edad y consumo continuo de pequeñas cantidades de la planta durante un tiempo muy largo, razón por la cual el padecimiento se considera de carácter crónico. Al respecto, se ha señalado que es necesario el consumo de 200 a 500 g diarios de la planta toxica durante seis meses a dos años, para que se produzca este cuadro. Sin embargo, otros investigadores consideraron que incluso cantidades de la planta menores a 10 grs./Kg. de peso vivo, ingeridas durante menos de 1 ano, ocasionan la aparición de este cuadro clínico.
 La morbilidad esta entre 10 a 20% y su letalidad es del 100%.


Tratamiento

No hay tratamiento específico, solo tratamiento sintomático (antibióticos, anticoagulantes, antiinflamatorios, etc.) por un tiempo. Una vez desencadenada la enfermedad es de carácter letal.


Métodos de control

Mecánico: tradicionalmente los agricultores recurren a la pala y al machete, medios que resultan poco eficaces, debido a que dejan intacto el rizoma, rebrotando luego los helechos con igual o mayor vigor.
El control manual de los helechos no da buenos resultados, debido a su forma de propagación; cuando tratamos de arrancarlos quedan rizomas (raíces subterráneas horizontales) en el suelo que pronto dan origen a una nueva planta.

Cultural: las poblaciones de helechos se ven sensiblemente disminuidas por la presencia de sombra, de ahí que en sistemas silvopastoriles esta maleza suele desaparecer o persistir, pero en pequeñas cantidades.
Debido a que siempre se ha asociado su presencia con suelos ácidos, es común que los agricultores apliquen cal, buscando modificar el pH para ejercer un control indirecto sobre el helecho. No obstante, no hay evidencias científicas de que por esta vía se puedan reducir las poblaciones de esta maleza.

Químico: diferentes investigadores han probado herbicidas para el control de esta maleza. Según el reporte de algunos autores "los mejores resultados en el control de los helechos se obtuvieron con 2,4,5-T más sal común, en dosis de 5 litros más 160 Kg./ha y con Glifosato a 5 litros por hectárea".
Con el uso de herbicidas sistémicos como Picloran (2 litros) mezclado con Metsulfuron en dosis de 10 a 15g, todo esto en 200 litros de agua, los resultados obtenidos en las pruebas realizadas han sido excelentes.
  
Biológico: desde el punto de vista del control biológico han sido reportados diferentes hongos de los géneros Ascochíta, Septoria y Phoma, que atacan al helecho en su estado natural. Sin embargo, todavía no existe una tecnología que pueda ser utilizada en materia de control biológico.









Implicancia en salud pública

La posibilidad de que la leche de bovinos sea vía de exposición del humano a los carcinógenos del Pteridium Aquilinum cobró importancia con la demostración de las propiedades carcinogénicas de la leche de vacas alimentadas con esa planta (Pamucku et al., 1978; Villolobos-Salazar et al., 1990).
 En estudios epidemiológicos realizados en Costa Rica, país con una de las tasas de incidencia de cáncer gástrico más alta en el mundo, se encontró que la población de las regiones altas, con potreros invadidos por el Pteridium aquilinum, sufre una tasa de incidencia de cáncer de estómago 2,73 veces mayor que la de la población que habita en las zonas bajas libre de Pteridium aquilinum (Villalobos-Salazar et al., 1989).
Otro de los elementos que ha dado impulso a los estudios sobre los efectos tóxicos del Pa lo constituye el aislamiento del ptaquilósido de leche de vacas alimentadas con esta planta (Alonso-Amelot et al., 1996; Villalobos-Salazar et al., 2000).
Todo esto condujo a que se realizaran investigaciones sobre los factores que pueden incidir en el nivel de contaminación de la leche en las regiones con pasturas invadidas por el Pteridium aquilinum.
Estudios recientes llevados a cabo en Costa Rica demuestran que la concentración de ptaquilósidos es mayor en el Pteridium aquilinum tierno, seguido por el intermedio y el adulto.
Se estudió también la influencia de la subespecie sobre los niveles de ptaquilósidos encontrándose una mayor concentración de esta sustancia en todos los estadios de crecimiento en la subespecie Arachnoideum que en los de la subespecie Caudatum (Villalobos et al., 2000).
También fue objeto de estudio la curva de eliminación del ptaquilósido por leche y los efectos de la cocción y de la pasteurización sobre los niveles del carcinógeno. Se encontró que el ptaquilósido aparece en la leche 54 horas después de la ingesta del Pteridium aquilinum, alcanza el pico de mayor concentración a las 78 horas y disminuye en un 50% a las 115 horas. La pasteurización y la cocción disminuyeron los niveles de ptaquilósidos en la leche en un 47% y un 74% respectivamente (Villalobos-Salazar et al., 2000).


POR LO ANTES MENCIONADO SE RECOMIENDA EVITAR EL CONSUMO DE LECHE DE ANIMALES ENFERMOS Y SOBRE TODO DE LECHE CRUDA.

La bibliografía de referencia y los estudios leídos para realizar el presente resumen datan desde 1976.


LES RECOMENDAMOS CHARLAR SIEMPRE CON EL PROFESIONAL VETERINARIO DE SU CONFIANZA PARA ACLARAR DUDAS.


jueves, 1 de noviembre de 2012

LEISHMANIASIS CANINA




Es una enfermedad grave, zoonotica, re-emergentes, producidas por un parásito microscópico (protozoario) del género Leishmania y transmitidas por la picadura de un mosquito muy pequeño (flebótomos) del género Lutzomyia (vector).


Distribución

Es de distribución mundial (72 países), entre países de economías desarrolladas y en vías de desarrollo.

La leishmaniasis se puede considerar una enfermedad endémica donde no se encuentra el vector. En nuestro país el área endémica de Leishmaniasis Tegumentaria abarca las regiones en las provincias de Salta, Jujuy, Tucumán, Santiago del Estero, Chaco, Catamarca, Corrientes, Misiones y Formosa.

Datos de Interés

Existen unas 20 especies de leishmanias patógenas para el hombre, y 10 han sido aisladas de perros.

Los perros domésticos son un importante reservorio para algunas formas de leishmaniasis humana. La distribución de los perros infectados es difícil de calcular debido, por un lado, a la existencia de casos de perros asintomáticos y, por otro, al largo período de incubación de la enfermedad que puede alcanzar una duración de 7 años. El perro es el principal no el único, reservorio urbano de la Leishmaniasis Visceral.

El flebótomo Lutzomyia longipalpis es el vector responsable de transmisión de la Leishmaniasis Visceral en Argentina.

El ser humano es un huésped accidental en el ciclo de transmisión de la Leishmaniasis Visceral.

En América Latina se conocen dos formas clínicas, la Tegumentaria (LT) y la Visceral (LV) que son transmitidas por mosquitos muy pequeños (flebótomos), y producidas por diferentes especies del parásito Leishmania.

En Argentina la Leishmaniasis Tegumentaria (especie habitualmente encontrada, especialmente en Misiones L. braziliensis), es endémica; una forma de Leishmaniasis que presenta manifestación cutánea en la primoinfección y lesión mucosa en aproximadamente el 20% de los casos cutáneos no tratados.

Los fenómenos climáticos inusuales y fundamentalmente los cambios ambientales relacionados con migraciones a áreas boscosas y rurales, o desde ellas a zonas periurbanas boscosas se vinculan con la aparición de brotes epidémicos.

Las grandes epidemias de esta forma de Leishmaniasis Americana se relacionan generalmente con el trabajo de deforestación, modificaciones en el medio o actividades relacionadas a zonas de vegetación arbórea densa, como pesca, explotación de petróleo, etc.

En otro orden, la Leishmaniasis Visceral en América Latina es una zoonosis urbana y rural grave, potencialmente fatal y epidémica, producida por el parásito Leishmania Donovani Chagasi, de importancia en salud pública dada la incidencia de humanos inmuno-competentes, con reservorio principal en el perro doméstico, y transmitida en el sur del continente exclusivamente por un insecto de la especie del complejo Lutzomyia Longipalpis.

Ninguna de las formas genera inmunidad y puede presentarse
infección subclínica o asintomática.


Signos clínicos de la leishmaniasis canina

Los signos clínicos de la leishmaniasis a diferencia de lo que se creía puden ser de amplia presentación. Los signos que se observan con mayor frecuencia en la clínica diaria son:
  • Lesiones en piel, desde pequeñas zonas alopecicas o como ronchas hasta grandes zonas ulcerosas, con tendencia a no cicatrizar. Son usualmente simétricas, crónicas y no pruríticas.
  • Pérdida de peso o pérdida de apetito, de presentación progresiva.
  • Linfadenopatía local o generalizada.
  • Lesiones oculares, como blefaritis asociada con dermatitis faciales en muchos casos.
  • Epistaxis , asociada con la inflamación y ulceración de la mucosa nasal.
  • Claudicación, puede deberse al crecimiento exagerado de las uñas.
  • Anemia.
  • Falla renal que se produce como resultado de la glomerulonefritis asociada a los inmunocomplejos.
  • Diarrea, causada en casos esporádicos por una colitis ulcerativa.
  • En casos más avanzados, la disminución de la actividad física es evidente. Los signos presentan una evolución lenta pero progresiva, con una pequeña o muy leve respuesta a los antibióticos o glucocorticoides.


Diagnóstico de la leishmaniasis

Diagnóstico clínico

La leishmaniasis no puede ser diagnosticada solamente mediante la observación de los signos clínicos por las siguientes razones:
  • Los perros examinados podrían estar infectados pero aparentemente sanos. Estos animales podrían estar incubando la leishmaniasis (casos de prepatencia), permanecer asintomáticos de por vida o podrían curarse espontáneamente.
  • Cuando los signos clínicos están presentes no son específicos y pueden ser compatibles o enmascarar otras enfermedades.

Además, se han descripto formas atípicas de leishmaniasis canina. Algunos casos presentan dermatitis localizada, colitis crónica y desórdenes de los sistemas cardiovascular, respiratorio y músculo-esquelético. Esto complica el diagnóstico clínico aún más.

Test de laboratorio

Los métodos diagnósticos mas usados para la leishmaniasis son:
  1. Parasitológico: examen microscópico.
  2. Serológico: detección de anticuerpos.

Método parasitológico: Consiste en la demostración de los parasitos con tinciónes de muestras tomadas de médula ósea o en aspirado de los nódulos linfáticos o improntas de las lesiones si las tuviese el animal.

Método serológico: Debido a que el perro enfermo clínicamente desarrolla altos niveles de anticuerpos circulantes, los test serológicos son una herramienta importante para el diagnóstico.

Kits rápidos: Los kits comerciales para la detección rápida de anticuerpos se usan mucho. Son fáciles de usar y dan un resultado en 10 minutos. La eficacia diagnóstica de estos kits ha sido evaluada y se encontró que la especificidad fue razonable.


Prevención de la leishmaniasis

Profilaxis

Una forma más económica y eficaz de control, donde los perros se saben reservorios, es prevenir la picadura de los flebótomos, y así la transmisión de la enfermedad.

Lo cual lo podemos hacer con:

  1. La colocación a los perros de collares impregnados con deltametrina, que actúa de forma prolongada como un almacén que se libera en la capa lipídica de la piel durante 6 meses. Éste método no requiere un equipamiento caro o personal entrenado para su uso. Si lo combinamos con un buen programa sanitario y de control veterinario, los resultados son muy buenos.
  2. La aplicación de pipetas repelentes para mosquitos cada 25 o 30 días, son un buen método de prevención.

Se recomienda extremar las medidas si vamos a ir a zonas donde los indices de enfermedad son altos.


Tratamiento de la leishmaniasis

El tratamiento de la leishmaniasis canina es difícil. Los fármacos usados son caros y todos requieren regímenes de varias dosis, lo que supone numerosas molestias tanto para los dueños como para el paciente. Existen frecuentemente recaídas de la enfermedad clínica después del tratamiento y muchos de los fármacos tienen efectos secundarios importantes. No hay cura parasitológica para la enfermedad, sólo podemos resolver los síntomas clínicos.


Estos son algunos conceptos referentes a esta dolorosa enfermedad que afecta principalmente a los perros, por lo tanto les recomendamos charlar siempre con el profesional veterinario de su confianza para aclarar dudas.

FACTORES CLIMÁTICOS Y OCURRENCIA DE ENFERMEDADES EN LOS CULTIVOS DE ESTACIÓN


Las actuales condiciones meteorológicas, con precipitaciones abundantes y en ocasiones granizos y vientos considerables, sumadas a las altas temperaturas de la estación, propician condiciones favorables para la ocurrencia de trastornos en la fisiología de los cultivos y la aparición de enfermedades de origen bacteriano o fúngico. En vista de estos factores, es imprescindible que en los esquemas productivos se refuercen los tratamientos fitosanitarios preventivos en base a funguicidas y productos bacteriostáticos.


Haciendo mención a los funguicidas, podemos reconocer dos grandes grupos:

De contacto: actúan en el lugar donde hacen contacto con la planta, y no son capaces de penetrar en el interior del vegetal. Estos controlan hongos epífitos, es decir de desarrollo externo, como por ejemplo el Oidio. Se reconocen fácilmente por el micelio, masa algodonosa externa.

Sistémicos: atraviesan la cutícula y traslocan vía floema hacia otros puntos distantes de la planta. Estos controlan hongos endófitos, o de crecimiento interno. Si bien pueden producir un micelio, el desarrollo de la enfermedad se da hacia el interior de la planta, provocando síntomas de clorosis, manchas, moteados, etc. que en muchos casos pueden hasta asimilarse o confundirse con una deficiencia nutricional. Las enfermedades causadas por los hongos aparecen siempre de la misma manera, se deposita una espora en la superficie del vegetal o planta, la cual bajo condiciones propicias de temperatura y humedad, dará lugar a la germinación y posterior desarrollo del micelio ya sea en superficie o hacia el interior de la planta.

Los tratamientos fungicidas pueden ser de dos tipos:

Preventivos: previenen la germinación de las esporas y posterior infección. Se utilizan fungicidas de contacto.

Curativos: cuando se debe controlar un micelio ya formado. Se utilizan fungicidas de contacto para epifitos y sistémicos para endófitos.

La incidencia de un ataque de hongos, puede variar drásticamente de un año a otro ya que dependerá de las condiciones del ambiente en cada estación. Generalmente las infecciones se dan en primavera y otoño para cultivos extensivos o a cielo abierto, mientras que en cultivos protegidos o de invernadero pueden ocurrir en todas las estaciones. La gran variedad de hongos existente hace que el fungicida sea un producto fitosanitario muy utilizado y además porque también los hongos van generando resistencia a un fungicida cuanto más concreto sea el punto de acción.

La elección del principio activo a utilizar, así como la periodicidad de aplicación dependerá principalmente del tipo y estado fenológico del cultivo, del riesgo potencial de ocurrencia de infección y del destino de la cosecha del cultivo. Por todo ello es imprescindible recurrir al asesoramiento profesional en este tema, en miras a lograr buenos índices productivos con el mínimo impacto ambiental.

EDEMA DE UBRE EN LA VACA LECHERA



Es una afección de la ubre donde hay acumulación de líquido en el parénquima de la ubre y en las zonas adyacentes; este líquido se localiza debajo de la piel y no en el tejido secretor.

Las causas pueden ser varias

Se piensa que puede deberse a una alteración en la circulación venosa (retardada u obstaculizada), como consecuencia de la presión que ejerce el feto en la cavidad pélvica, además del alto requerimiento de proteínas por el último tercio de la gestación.

El edema también puede manifestarse ante la presencia de agentes bacterianos que causan mastitis producen edemas duros o fibrosos.

Esta patología suele presentarse en vacas de primerizas o antes del parto, o en vacas alimentadas con altos contenidos de energía antes de la parición.

Por eso el productor debe siempre ir observando la ubre de su vaca antes del parto, teniendo en cuenta que al ser un proceso inflamatorio produce mucho dolor, lo que ocasiona malestar al animal. Como consecuencia del gran aumento de tamaño los ligamentos que sostienen la ubre, esta tienden a debilitarse, con lo cual está mas péndula lo que nos trae aparejado un aumento de las posibilidades de traumatismos en los pezones y en la mama.

El tratamiento es de muy fácil aplicación y la recomendación siempre es consultar con un Profesional Veterinario que le de las indicaciones.

Glosario Técnico

Parénquima: Tejido constitutivo de un órgano que asegura su funcionamiento.

Mastitis: Proceso inflamatorio de la glándula Mamaria.